Vicecomodoro (R) Médico EDB
Carlos Leopoldo MOLINA
Carta de su esposa

AL Sr. PRESIDENTE DE LA FUNDACIÓN MARAMBIO

Estamos sufriendo la pérdida irreparable mi esposo el Dr. Carlos Leopoldo Molina, quien tras una larga enfermedad que lo hacía sufrir bastante; más conociendo él su situación por ser médico, siempre la llevó con mucha serenidad y apego a la Fe.

Hoy sabemos que descansa en paz, y su paso por este mundo fue fecundo colmado de buenas obras, siendo una persona Honesta, Solidaria, Responsable y Generosa.

Siempre antepuso el deber hacia los demás para cumplir su profesión de Médico en la Fuerza Aérea Argentina.

Abrazó la Fuerza por amor y gran convicción de que ese era su lugar, avalado lo dicho por el reconocimiento que hoy le tributan las personas de todos los destinos que tuvo durante su actividad Militar.

Además fue egresado de la primera promoción de " ESPECIALISTA EN MEDICINA LABORAL", (1976), de la UNIVERSIDAD NACIONAL DE CBA, con una notable trayectoria en la especialidad, como médico Laboral de Empresas, Director de La Clínica del Trabajo, médico perito, consultor, etc., por mencionar parte de su actividad profesional.

Hablar de su paso por La Antártida, me produce una gran emoción, ya que para él fue un destino muy querido, donde pudo realizar tareas como militar y fundamentalmente de Médico del cuerpo y del alma de cada integrante de la Dotación.

Encontré un reconocimiento de la Armada Argentina elevada por el Comandante del Rompehielos ARA General San Martín, Benigno Ignacio Varela, con fecha 8 de enero de 1965, para el Comandante en Jefe de la Fuerza Aérea Argentina. En la misma se hace expreso reconocimiento por..." la voluntaria colaboración del Primer Teniente Médico Carlos Molina en la cirugía de dos tripulantes de dicho buque por apendicitis... quién demostró gran espíritu de camaradería poniendo a disposición del Comando de la citada unidad sus servicios, que sin duda resultaron sumamente oportunos y valiosos..."

Fue una época difícil donde debían sortear diferentes dificultades, todo esto me trasmitió mi esposo con mucha pasión, lamentando no haber podido volver.

En esta ciudad de Córdoba integró el Grupo de Expedicionarios al Desierto Blanco, en su mayoría personal de Fuerza Aérea, el Ejército.

En cada destino ordenado por la Fuerza Aérea, hizo difusión de la Antártida, en colegios de diferentes niveles y en grupos de colegas civiles, con el material necesario para ilustrar el contenido.

Le pido disculpa por extenderme tanto en la referencia de mi esposo, más es lo que mi corazón me dicta en este momento.

Me siento feliz y orgullosa de poder integrarme a esta Fundación donde existe parte de la vida del Dr. Molina, agradecer en su persona a todos los integrantes de la misma por la deferencia de su comunicación y contención en este difícil momento.

Dentro de mis posibilidades cuente con mi participación.

Le envío las fotos solicitadas y espero haber logrado una clara comunicación con Ud.

LIC. FGA. MERCEDES DEL VALLE VERA