Palabras pronunciadas en el
109° aniversario de la Base Antártica Orcadas
por el Jefe de Base Orcadas, Capitán de Corbeta Ariel Gustavo SILES

"Camaradas:

Hoy hacemos un alto en nuestra ardua labor de continuar poniendo a son de mar a nuestra centenaria y querida base orcadas, muy particularmente para rememorar un nuevo aniversario de su creación y ya saboreando la dulce sensacion de la satisfaccion del deber cumplido para con nuestra patria, tras mas de un año de haber recalado y vivido en este pristino paraje de la isla laurie

Asi es que en el día de hoy, y gracias a nuestra pionera tradición antártica de 109 años ininterrumpidos en esta base, me atrevo a aseverar que al ver flamear nuestro pabellón en esta inhospita isla, a cada uno de nosotros se nos hincha el pecho con orgullo, y seguramente con la misma intensidad que habra sentido en 1902, nuestro precursor antartico: el alferez de fragata dn. José maría sobral, al invernar dos años seguidos a la joven edad de 21 años, luego de arribar a este continente desconocido, a bordo de la expedición sueca del dr. Nordenskjold, la que quedó apresada por la fuerza de los hielos, siendo luego rescatados por la gloriosa corbeta uruguay.

Mismo orgullo que le cupo dos año mas tarde, en este incipiente hito de soberanía y con solo 18 años de edad al sr. Hugo alberto acuña, quien describia en sus memorias:

"a pesar del frío, vestimos traje de paseo, como en buenos aires. Hay 5 grados bajo cero. La bandera asciende en el modesto mástil y comienza a flamear. Ya tenemos listo el pabellón azul y blanco. Ya estamos en nuestra propia casa."

Tengamos presente que este pedazo de patria nos puso en escena como actores principales de una gran historia conocida por sus meritorias actividades y logros. 

Por ello, recordemos que el escoces william speirs bruce, a bordo de su buque, el "scotia", zarpaba de buenos aires rumbo a las islas orcadas del sur. Trayendo abordo a su primera dotacion argentina de tres hombres: hugo alberto acuña, edgardo szmula y luciano honorio vallete, que invernarian junto con dos hombres de su dotacion robert mossman y williams smith, quienes oficiaron conjuntamente como meteorologo y cocinero de la base.  

Siendo asi, que luego de un mes de navegacion  y ya pisando estas mismas piedras, el día 22 de febrero de 1904, en solemne ceremonia, la nueva dotación recibió la base, retribuyendole al dr. Bruce sus sentidas palabras, cantando el himno nacional argentino y luego el himno inglés.

Tambien fue así que durante 40 años la argentina fue el único ocupante permanente en este desolado continente, contando con el primer observatorio metereologico y geomagnético, así como la primera oficina de correos antartica, debiendose reconocer en ello la visionaria iniciativa del perito francisco moreno y su ferrea labor por nuestros intereses en la patagonia y de nuestra presencia proyectada a la antártida.

En otro sentido, es importante reflexionar sobre esta singladura hasta aquí trazada en nuestras vidas, habieéndola realizado  con firmeza en el timon de nuestras acciones y con una proa orientada con rumbo hacia el compromiso asumido.

Para ello, disfrutemos de la anecdótica e inolvidable experiencia de haber habitado esta base antartica, asi como de la grata oportunidad de haber interactuado a diario entre camaradas civiles y militares, pertenecientes a la direccion nacional del antartico, al cuerpo de guardaparques, a la fuerza aérea comisionados en el servicio meteorologico nacional y a la armada argentin

disfrutemos también de nuestro importante aporte brindado en pos del apoyo a la ciencia; y por supuesto de este llamativo estilo de armonía en que convive el hombre con la naturaleza en su expresion mas pura y salvaje; ya que entre otras cosas, estos son algunos de los ingredientes de una experiencia de vida que lamentablemente fue y es una oportunidad disponible para pocas personas en el mundo.

Esto mismo, hace para nosotros, que como ciudadanos argentinos, podamos contribuir con los objetivo de nuestra nación en estas latitudes, al haber ratificado el tratado antártico, que fuera creado el día 1º de diciembre de 1959.

Por último, no nos permitamos desaprovechar esta oportunidad para cobijar en nuestras memorias, en un simple pero valedero y merecido homenaje, a todos aquellos compatriotas que la mala fortuna los barrenó hasta su último fondeadero en estos suelos, aires y mares helados.