"Todo tiene su momento y cada cosa su tiempo bajo el cielo, su momento el plantar, su tiempo de recoger lo plantado..."

Hemos creído siempre, que toda acción humana, para ser noble, ha de estar asentada sobre un ideal y con sólo creer que algo existe, ayuda a encontrarlo.

Las manifestaciones de la vida nunca tienen un sentido aislado. Todas las circunstancias se coordinan y entrelazan entre si.

Es por eso, que Asociación Sumamos Argentinos Solidarios (S.A.S.) nace como una necesidad casi espontánea que une a las personas por la semejanza de sus convicciones, de sus costumbres, de sus sentimientos, de sus deberes y por la similitud de sus pensamientos pero más aún por el cotidiano accionar de la vida.

Por las circunstancias que vive el país, que debido al exceso de individualismo lo han llevado a la disociación y en consecuencia se ha ido perdiendo el verdadero sentido de solidaridad, es que nos ha incitado a la organización de estos encuentros, que se realizan, con la intención de distinguir los grandes valores que la sabiduría pone en los hombres y donde se privilegia el concepto de la vida, de la moral, de la dignidad…

Representa para nosotros el mejor homenaje al que pueden aspirar todos los Argentinos de bien, que se desempeñan en la comunidad, modestos trabajadores, con la única pretensión de servir con sus fuerzas, abnegación y sacrificios, y que se desarrollan, algunos anónimamente, delegados, desinteresados y sin necesidad de mostrar sus valores trascendentes y sobre todo, convencidos del mayor respeto por la vida humana.

En todo momento y en todo lugar el respeto por su obra y sus ideas, el respeto por su dignidad y sus valores y que no esperan del futuro, otra cosa que preservar y prolongar las tradiciones de nuestra patria debe ser entonces, el patrimonio de todos los habitantes del suelo argentino bien intencionados, dignos, valerosos y honorables.

Es entonces asociación S.A.S., un mandato histórico del cual no podemos declararnos desertores.

Porque creemos, que a los problemas que nos desafía la realidad, debemos darle respuestas creativas, originales y prácticas a la vez, formadas por un pensamiento de grandeza.

Es imposible imaginar una vida libre y sin compromisos si no tenemos principios éticos, y la ética consiste en la corrección del egoísmo. Así, nuestra virtud no es perfecta hasta ser completada por la ética que mide los valores morales y personales.

Al verdadero sentido de la comunidad se llega desde abajo, no desde arriba, en consecuencia no debemos establecer como ha de procederse, siempre por el equilibrio y la responsabilidad y conformar así una responsabilidad y conformar así una comunidad donde cada uno de nosotros podamos hallar la justificación de nivelar esa tendencia hacia la igualdad y que es la que determina nuestro accionar en la vida; que es en definitiva la mejor manera de preservar nuestros sueños, nuestros valores, nuestro presente y nuestro futuro.

Será entonces, un crisol sincero de sana convivencia y amistad; y decimos amistad, porque pertenece al orden de los sentimientos voluntarios y espirituales.

Es una cuestión de afecto y los afectos nacen cuando encontramos en otras personas similitud de pensamientos, de ideas o de virtudes. El afecto es también una motivación y la motivación es el sentido oculto del deseo: el deseo de querer ser, el deseo de querer tener, pero profundamente, el deseo de querer hacer.

Es además, un sentimiento, un compromiso de vida, es respetar e inspirar respeto, es sembrar la virtud, practicándola, es sentir la verdad, diciéndola, es establecer el ejemplo, ejerciéndolo y ayudar así a conformar una sociedad cuyo patrimonio más valioso debe ser el hombre, donde privilegia el concepto de la vida, de la familia, de la moral y de la dignidad.

Nuestro país no ha perdido su capacidad para responder al desafío y aunque los desafíos de hoy parezcan aterradores en su complejidad, no hay motivo para desesperar, porque cuanto más y mayores sean ellos, más ejemplar será el heroísmo del pensamiento, la hazaña y el valor para superarlos.

En consecuencia, aspiramos a proporcionar a las generaciones futuras, una vida más plena, más fuerte en el respeto de sus derechos y más feliz en el cumplimiento de sus deberes.

Si felices nos sentimos por lo hecho y lo que seguiremos haciendo, más aún debemos sentirnos por el convencimiento de que es la obra de todos y de cada uno de nosotros.

Cuando decimos que el hombre experimenta la necesidad de expresarse y comunicarse, se refiere a una situación en que él, ya ha evolucionado…

Así, en conclusión es el bien que se ordena a la acción, bajo la Razón de la verdad la mejor recompensa de la buena acción, es haberla realizado.

"La vida se concibe a cambio de honrarla, no de venderla..."

La Dirección

MARÍA DEL CARMEN BLANCO
Presidenta Asociación S.A.S.

"Bienaventurados, a los que hacen historia por cultivar la memoria de una nueva generación"