Acto del 56 aniversario de la
Dirección de Asuntos Antárticos
Discurso de su director, el Comodoro EDB Enrique Oscar VIDELA

"En el orden natural del planeta, las regiones polares ocupan una posición única.

En ellas, auténticos extremos de la Tierra, reina el frío que es la antítesis de la vida.

La Antártida nunca fue el hábitat nativo del hombre, el rigor climático y su aislamiento con respecto a otras masas terrestres, hicieron que el denominado “sexto continente” quedara marginado geográficamente y de las grandes migraciones prehistóricas que se fueron expandiendo sucesivamente del viejo mundo.

Muchos años más tarde, ya en épocas más recientes, cuando el hombre fue sentando sus bases en el continente blanco, el 15 de mayo del año 1961 se crea la División Antártica de la Fuerza Aérea pocos días después de la instalación de la Base Conjunta Teniente Matienzo.

Posteriormente esta División paso a llamarse Departamento Antártico dependiendo del antiguo Comando de Operaciones Áreas, y unos años más tarde por la importancia de las funciones que se realizaban a nivel operativo y logístico, cambio su denominación a la de Dirección de Asuntos Antárticos dependiente del actual Comando de Adiestramiento y Alistamiento.

Pasaron ya 56 años y hoy que celebramos el quincuagésimo sexto aniversario de su creación, es justo rendir un sentido homenaje a todos aquellos hombres y mujeres, antárticos de ayer y de hoy, que fueron y son testigos de las primeras epopeyas de aquellos que con esfuerzo y coraje vislumbraron el compromiso Nacional con la actividad antártica, y que comprendieron el significado y trascendencia del medio aéreo y la infraestructura asociada, para abrir un puente aéreo y logístico permanente con el continente antártico (año 1969).

Al abrirse esta vía de comunicación aérea permanente con este Continente, se inició una nueva era en la Historia Antártica, dando grandes posibilidades no solo a lo que hace a la presencia argentina en el territorio, con las actividades de investigaciones científicas y técnicas, sino también permitiendo cimentar nuestra presencia soberana.

Varios años han pasado desde esa fecha y en este período otras obras y acontecimientos, han cambiado la fisonomía que forjaron los pioneros, porque nuevos actores se sumaron a la epopeya de las realizaciones, y esta historia rica en nuestra cronología antártica merece y debe ser contada.

Hoy la Fuerza Aérea, mediante la Dirección de Asuntos Antárticos planifica, administra, ejecuta, y supervisa en forma regular el apoyo logístico a la actividad antártica Nacional e Internacional con los sistemas aéreos Hércules, Twin Otter, MI 171 E y Bell 212, que operan en las Bases Antárticas Marambio y Matienzo, utilizando como nexo la Base Aérea Río Gallegos.

Cada año las Campañas Antárticas de verano e invierno son realizadas demandando un gran esfuerzo de planificación, coordinación y sostén logístico.

Este año en particular debido a la ejecución del puente aéreo de abastecimiento a la Base Marambio, exige un esfuerzo adicional de recursos humanos y materiales, pero todas estas actividades no podrían realizarse sin el apoyo extraordinario que realiza el Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, a través del Comando Operacional Conjunto, y del Comando de Alistamiento y Adiestramiento, quienes entienden de la trascendencia e importancia de la presencia de las Fuerzas en apoyo al desarrollo y ejecución de operaciones antárticas en nuestras Bases permanentes y transitorias, al que hay que sumarle además el apoyo invalorable de la Dirección Nacional del Antártico, el Instituto Antártico Argentino, el Servicio Meteorológico Nacional, y las otras Direcciones y Comandos Antárticos.

Este quincuagésimo sexto aniversario dista mucho en complejidad y recursos de lo que era en antaño, pero el espíritu de Marambio y Olezza están presentes proclamando el anhelo de planificar y ejecutar operaciones cada vez más al sur, en este sentido se está evaluando la factibilidad de la operación y construcción de una pista en los hielos azules, con un doble propósito, poder abastecer logísticamente a la base Belgrano II, y de esta manera poder romper su alistamiento producto de su ubicación geográfica, y apoyar el desarrollo de proyectos científicos en esa zona, como así también la determinación de puntos de redespliegues o estaciones de apoyo en el sector Este de la península que permitan proyectar los medios aéreos de pequeño porte a altas latitudes.

Esta Dirección además de sus funciones operacionales y logísticas, ratifica su compromiso con el cuidado y protección del medio ambiente, en este aspecto celebrando el año de las energías renovables la Base Marambio está en una etapa avanzada con vistas a su tercera recertificación de la Norma ISO 14001 Sistema de Gestión Ambiental, y están en proceso de ejecución proyectos para el uso de energías renovables, el cual se compone de diversas actividades cuyas metas comunes convergen en el uso de energías alternativas, como es la energía eólica, solar, con el objetivo de minimizar al máximo posible el impacto negativo al medio ambiente, y reemplazar total o parcialmente los combustibles de origen fósil, al tiempo de lograr un uso más eficiente de la energía generada.

En este mismo sentido, y coincidente con los contenidos incluidos en el Plan de Apoyo a las Actividades Antárticas, se está en la etapa de revisión del Plan Maestro de Obras de la Base de cara a un futuro con la premisa de que responda a los lineamientos de la eficiencia operacional y energía, el anteproyecto de instalación de un radar secundario monopulso y la adquisición de equipos de comunicaciones ATS, que incrementarán las capacidades de vigilancia y control del espacio aéreo, que sumadas a las ayudas a la navegación ya existentes permitirá mejorar la seguridad de las operaciones áreas en el sector.

Como estos ejemplos existen muchos más para destacar, los que están ejecutando, y los que están en proceso de planificación, pero este cúmulo de actividades, sin ningún lugar a dudas se sustenta mediante ese valor agregado que lo constituye el esfuerzo diario de hombres y mujeres que participan de una y otra manera, de su compromiso y sentido de pertenencia.

A todos ellos les reitero las GRACIAS, a los que están y a los que se han ido, (y en este sentido quiero recordar la figura del General Jorge Leal, la comunidad antártica perdió un gran hombre y un pionero, la inmensidad de los hielos antárticos recordaran su nombre, y del Cabo Primero Gustavo Capuchino, que hace un año nos dejó cumpliendo un sueño, su paso por la base será por siempre recordado como sinónimo de compromiso y entrega, que el Señor los tenga en su gloria), los que han venido hoy aquí y a los que nos esperan, GRACIAS por su respaldo, sin ustedes, sin aquellos a los que queremos y con los que celebramos nuestros pequeños triunfos o nos refugiamos cuando tropezamos, cualquier victoria carece de sentido, compartir este nuevo aniversario con ustedes es nuestro mayor deseo.

La actualidad marca una realidad y un futuro promisorio, en donde la política, la ciencia y la logística, son aspectos mutuamente interdependientes, en donde se proyectan los intereses y se reafirma día a día el compromiso de nuestro país hacia el Continente Antártico.

La Antártida nos ha enseñado varios caminos, los hemos visto a través de nuestros grandes hombres, nos enseñó a integrarnos en momentos de desintegración, nos permitió entender fenómenos naturales y las consecuencias de alterar el medio ambiente, nos incluyó en la cooperación internacional, y tal vez, lo más importante nos comprometió con los valores nacionales.

Quisiera en este momento hacer un paréntesis en la alocución y cederle la palabra al Jefe de Base Marambio, Vicecomodoro Ricardo Martínez. (comunicación por teleconferencia)

Por último, deseo agradecer: a las familias de quienes nos precedieron y a nuestras familias, por su gran sacrificio y fundamental apoyo, a la Fuerza Aérea Argentina por habernos confiado tan desafiante empresa y a Dios nuestro señor por su protección, compañía y por regalarnos el privilegio de esta experiencia.

'Amen la realidad que construyan, y nada, ni nadie, detendrá su vuelo'.

Un dicho popular dice que la música refleja el alma, y en sus letras cuentan lo que sentimos, esta canción expresa el sentir de aquellos que lejos de sus afectos y sus hogares, cumplen una misión, un sueño antártico."

Canción "Mi Base Marambio" interpretada por el grupo musical La Troja.